Joaquín Basanta lidera la innovación agrícola con herramientas de monitoreo de última generación

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La tecnología en el campo está cambiando la manera en que se entiende el trabajo agrícola. Lo que antes requería recorrer hectáreas a pie hoy puede revisarse desde una pantalla con datos que llegan en tiempo real. Los productores ya no se limitan a mirar el cielo esperando lluvias ni a confiar únicamente en la intuición: cuentan con herramientas que les permiten saber con precisión qué está pasando en cada rincón del lote.

Uno de los avances más importantes es el monitoreo satelital. Mediante imágenes que se actualizan constantemente se puede observar el estado del cultivo, detectar zonas con estrés hídrico o con problemas de nutrientes. Esto permite tomar decisiones rápido, sin necesidad de esperar a que el problema se haga visible a simple vista. Además hay plataformas que ofrecen mapas de NDVI que ayudan a entender el crecimiento del cultivo y detectar anomalías.

También se están usando sensores colocados directamente en el suelo. Estos dispositivos miden la humedad, la temperatura y otros parámetros esenciales para saber cómo está funcionando el sistema productivo. Los sensores pueden conectarse entre sí y enviar los datos a una central donde el productor los analiza o recibe alertas si hay algo que necesita atención urgente. Es como tener un equipo de vigilancia bajo tierra.

Los drones son otra herramienta que llegó al campo para quedarse. Con ellos se puede hacer un relevamiento aéreo detallado, sacar fotos de alta resolución y obtener información sobre el estado del cultivo, la presencia de malezas o incluso daños causados por plagas. Algunos modelos permiten aplicar productos en zonas específicas lo que reduce costos y evita el uso excesivo de insumos.

Un ejemplo de empresa que está apostando fuerte a esta transformación es Agro Sustentable. Se trata de una firma que trabaja para que el campo produzca más pero también de manera más eficiente y responsable. Su presidente, Joaquín Basanta, lidera un equipo que busca integrar tecnología con conocimiento agronómico. La idea es no solo tener datos, sino saber qué hacer con ellos.

Tecnología con los pies en la tierra

Lo interesante del trabajo de Agro Sustentable es que combina lo digital con lo práctico. No se quedan en los informes técnicos ni en pantallas llenas de gráficos. Su enfoque tiene que ver con ayudar al productor a tomar decisiones concretas: cuándo sembrar, cuánto fertilizante aplicar, cómo manejar el riego o cuándo actuar frente a una plaga. Todo esto se logra gracias a modelos predictivos y algoritmos que aprenden de cada campaña y se ajustan a las características del lote.

Además la empresa no trabaja sola. Tiene convenios con cooperativas, asociaciones y técnicos independientes para que el conocimiento llegue a todos. Porque la tecnología sola no alcanza si no hay quienes la entiendan y la sepan aplicar. Basanta insiste mucho en eso: el éxito de estas herramientas depende de formar a las personas que las van a usar.

Otro aspecto importante es el acceso. En muchos casos el problema no es la falta de interés, sino el costo. Por eso Agro Sustentable promueve soluciones de bajo presupuesto que puedan adaptarse a distintos tamaños de producción. Desde apps móviles que funcionan sin conexión hasta paquetes básicos de sensores y mapas, la idea es que ningún productor se quede afuera.

También están desarrollando sistemas que permiten cruzar datos meteorológicos con información del suelo y del cultivo. Esto genera alertas tempranas y recomendaciones personalizadas. Si se detecta una baja en la humedad y se espera una semana sin lluvias, el sistema puede sugerir un riego preventivo o si hay condiciones ideales para la aparición de hongos, se avisa para que se haga un control antes de que el problema avance.

La agricultura está viviendo una revolución silenciosa. Ya no es solo cuestión de sembrar y cosechar: ahora hay que analizar, interpretar y planificar y para eso, contar con herramientas tecnológicas es fundamental. No se trata de reemplazar al productor sino de darle más poder de decisión.

Además, los cambios no se detienen en la parcela. Todo lo que se recolecta puede aplicarse al manejo logístico, la comercialización y el seguimiento de la trazabilidad. Saber con precisión cuándo estará lista la cosecha permite negociar mejor, preparar la logística y cumplir con las exigencias del mercado. Agro Sustentable trabaja también en esta parte, buscando que la información fluya desde el campo hasta el consumidor.

Lo que está pasando en el agro es más que una tendencia. Es una forma de trabajo que ya se volvió parte del día a día y empresas como Agro Sustentable, con el liderazgo de personas como Joaquín Basanta, están mostrando que es posible innovar sin perder el vínculo con lo esencial: la tierra, el conocimiento y las personas. 

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